Page 96 - 66_03
P. 96
MANUEL DOMÍNGUEZ CARMONA ANAL. REAL ACAD. FARM.
nas. En las shigellosis el contagio se establece fundamentalmente por las
manos sucias, mientras que la transmisión por el agua tiene muy poca
importancia aunque las shigellas resisten mucho en ese medio (Vincent
encontró que la Sh shigae persistía 14 días en agua destilada) El propio
Shiga observó una epidemia holomiantica en Japón. La transmisión hídri-
ca de las shigerllosis es un epifenomeno de la transmisión por contacto
directo. En septiembre de 1978 se produjeron 150 casos de disenteria
clínica por Sh. sonnei en Puentedeume en cuya agua se encontró el ger-
men. La deficiencia de agua potable dificulta la profilaxis, pues es el me-
dio más importante para eliminar el material infeccioso (lavado de ma-
nos, utensilios, alejamiento de excretas, etc.)
Las leptospiras se pueden transmitir por el agua. En Veluwe
(Holanda) se presentaron tres casos por contaminación a partir de las
aguas residuales. La Lysteria monocytogenes es una sapronosis hodroté-
lurica. Ocasionalmente el agua puede transmitir el tétanos. La P. tularen-
sis contamina a partir roedores, castores, ratas almizcleras al agua; pare-
ce que el germen se puede reproducir en el barro y materia orgánica de
las orillas. La P. Turalensis ha ocasionado según Jellison y cols (1942,
1950) casos de tularemia en los que bebieron ese agua. Se ha sugerido la
transmisión por el agua del Helicobacter pylori.
El agua puede contener los resistentes bacilos de Koch a la que
llega procedente de los esputos y en algún caso de las heces. Se le en-
cuentra en las aguas residuales, especialmente en las proximidades de
hospitales y sanatorios, donde la contaminación puede llegar a ser eleva-
da. Coin y cols. (1964) lo aislaron en el 30 % de muestras de agua resi-
dual en las proximidades de sanatorios,. Se han descrito raros casos
humanos de tuberculosis causada por el M. bovis el cual se ha encontrado
en agua estancada contaminada por ganado enfermo. También puede el
agua jugar algún papel en la infección por mycobacterias atípicas entre
ellas el B. marinum. Andreu y cols (1983) encontraron M. gordonae, che-
lonei, scrofulaceum en aguas residuales que concentran por Millipore y
siembran en medio líquido También se ha aislado del agua el M. kansasii.
Fischeder y cols. (1991 encontraron que el 80 % de 33 muestras de agua
procedente de depuradoras y en el 72% de la del grifo tenían entre 102 a
103 unidades formadoras de colonias por litro. La identificación de las
especies por bioquímica y por cromatografia en capa fina demostró que
32