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C.
Martín
y
A.
I.
Torres
secundarios
detectados
a
dosis
terapéuticas
son
fatiga,
neutropenia,
mucositis,
hiperglucemia
y
estomatitis
(21).
En
un
estudio
en
fase
II,
everolimus
ha
demostrado
actividad
antineoplásica
en
pacientes
recién
diagnosticados
de
cáncer
de
mama.
También
está
siendo
evaluado
en
ensayos
con
pacientes
con
cáncer
de
próstata
y
neuroendocrinos.
Deforolimus
Deforolimus
(AP23573)
es
el
último
análogo
desarrollado
a
partir
de
la
rapamicina.
Es
estable
en
solventes
orgánicos,
soluble
en
agua
en
un
amplio
intervalo
de
pH,
así
como
también
en
plasma
y
en
sangre,
tanto
in
vivo
como
in
vitro.
AP23573
presenta
una
potente,
rápida
y
prolongada
actividad
inhibitoria
de
mTOR,
lo
que
produce
una
inhibición
del
crecimiento
de
diversas
líneas
tumorales
humanas
in
vitro,
ejerciendo
este
efecto
tanto
individualmente
como
en
combinación
con
otros
agentes
citotóxicos.
En
un
estudio
clínico
de
fase
I,
se
administró
por
vía
intravenosa
durante
5
días
en
intervalos
de
24
horas.
Durante
el
primer
ciclo
de
tratamiento
se
produjo
una
toxicidad
severa
tipo
3
limitante
de
la
dosis,
consistente
en
una
mucositis
oral
aguda.
Se
observaron
otros
efectos
secundarios,
aunque
de
menor
intensidad,
entre
los
que
destacaron
episodios
menores
o
moderados
de
mucositis,
diarrea,
anemia,
nausea,
fatiga,
trombocipenia,
neutropenia
e
hiperlipidemia.
Se
detectó
actividad
antitumoral
preliminar
a
todas
las
dosis
ensayadas
en
el
estudio.
En
estudios
en
fase
II
en
pacientes
con
sarcoma,
deforolimus
mostró
una
tasa
de
beneficio
clínico
del
29%;
en
otro
estudio
en
cáncer
de
endometrio
la
tasa
de
respuesta
fue
del
9%,
al
igual
que
en
neoplasias
hematológicas
(20).
Actualmente
se
están
desarrollando
estudios
en
fase
III.
3.3.
Inhibidores
de
EGFR
EGFR
o
receptor
del
factor
de
crecimiento
epidérmico
es
un
receptor
tirosin--quinasa
que
se
activa
por
ligandos
tales
como
el
factor
de
crecimiento
epidérmico
(EGF).
Esto
desencadena
la
activación
de
vías
de
señalización
intracelulares,
tales
como
la
proteína--quinasa
activada
por
mitógenos
(MAPK)
y
la
fosfatidilinositol
3--quinasa
(P13K)--AKT,
ambas
involucradas
en
la
supervivencia
y
proliferación
celular
(22,23).
Su
sobreexpresión
en
tumores
a
menudo
se
correlaciona
con
mal
pronóstico,
disminución
de
la
supervivencia
y
resistencia
a
la
terapia.
La
desregulación
de
EGFR
(por
su
sobreexpresión
o
por
una
activación
excesiva)
contribuye
a
la
proliferación,
transformación,
angiogénesis,
invasión,
metástasis
y
la
inhibición
de
la
apoptosis
en
células
tumorales
(24).
Por
lo
tanto,
moléculas
inhibidores
de
este
receptor
tienen
especial
interés
como
agentes
antineoplásicos.
Se
han
identificado
dos
tipos
de
inhibidores
de
la
señalización
de
EGFR:
--
Moléculas
pequeñas
como
gefitinib
(ZD1839)
y
erlotinib
(OS1774)
que
inhiben
el
dominio
tirosina
quinasa
intracelular
del
receptor
EGFR
(9).
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