Page 153 - 74_ex
P. 153
VOL. 74 (E.), 595-607, 2008 LOS SUELOS
cas, propiedades, materiales y tipo de horizontes de los suelos, y eso
lleva a unas definiciones que son las que vamos a seguir emplean-
do nosotros. Pero el año 1993 la FAO agrupaba esos grandes grupos
en función de la situación que más condicionaba la formación de
los suelos. Y de las ocho posibilidades que contempla la FAO, en
cinco de ellas englobamos los suelos de Valdelateja, suelos que se
corresponden con ocho grandes grupos. Estos suelos son Fluvisoles,
Regosoles, Leptosoles, Cambisoles y Luvisoles, con inclusiones de
Antrosoles y Vertisoles. Y aunque no dentro del término, pero muy
próximo a él, Podsoles.
El primer condicionamiento viene dado por la influencia humana
que en casos extremos da lugar a los Antrosoles. Condicionamiento
muy claro es el tipo de material de partida y aquí incluimos los
Vertisoles. Influencia muy decisiva la tiene el relieve y con esa de-
pendencia tenemos Fluvisoles, Leptosoles y Regosoles. Suelos en los
que se produce un movimiento pronunciado de arcilla, hierro o
humus lo tenemos con los Luvisoles y Podsoles. Por último suelos en
los que su condicionamiento fundamental es simplemente su edad,
la tenemos con los Cambisoles.
Atendiendo a su posición topográfica tenemos, por un lado, con
mayor desarrollo edáfico, aquellos suelos desarrollados en los pá-
ramos, en los restos de los mismos y en general en las zonas más
llanas del término y con menor desarrollo aquellos otros suelos que se
localizan en los escarpes y en las laderas. Los suelos que encontramos
en posiciones llanas son fundamentalmente Cambisoles y Luvisoles, y
como inclusiones en situaciones especiales como depresiones tenemos
Vertisoles. Es decir, suelos con perfil ABC, mientras que en los escar-
pes y cuestas encontramos en general suelos con perfil menos diferen-
ciado, AC, como son los Leptosoles, Regosoles y en zonas menos ero-
sionadas de estos escarpes, con mayor protección arbórea también
encontramos suelos de perfil ABC como los Cambisoles. En pequeñas
vegas y márgenes de los ríos tenemos ejemplo de los Fluvisoles y como
ejemplo de Antrosoles lo encontramos en el mismo jardín del Balnea-
rio. Por último, y fuera del término, sobre arenas de un Cretácico in-
ferior, quiza Albiense, encontramos retazos de un suelo muy especial,
Podsol, que es el resultado de una edafogénesis, también muy espe-
cial, que ya hemos citado anteriormente, llamada «podsolización» y
que analizaremos en apartado aparte.
601