Page 29 - 88_01
P. 29
ANALES En un ensayo multicéntrico realizado entre diversos hospi-
RANF tales de Australia, Estados Unidos y Singapur se realizó un estudio
prospectivo partiendo de un grupo de 1.600 diabéticos y haciendo
www.analesranf.com un seguimiento promedio de 8 años (32). Basándose en la menor
supervivencia de los diabéticos que presentaban retinopatía en el
arrosariamiento venoso, indicando el desarrollo de retinopatía no momento de sufrir un ictus, en este estudio se concluyó que la reti-
proliferativa que progresivamente pasa de leve, a moderada y a nopatía diabética puede predecir los ictus isquémicos independien-
grave; en el caso de que sea una retinopatía proliferativa, ésta se temente de otros factores de riesgo. Además, estos datos confirman
caracteriza por la aparición adicional de nuevos vasos sanguíneos, lo que ya se había observado previamente en necropsias, el accidente
acompañados de hemorragia vítrea y edema (Figura 4b). Los casos cerebrovascular en los diabéticos está relacionado más frecuente-
más graves pueden evolucionar hacia una pérdida total de la visión. mente con la enfermedad microvascular cerebral.
5. LA CIRCULACIÓN DE LA RETINA COMO MARCADOR DE EN-
FERMEDAD CEREBROVASCULAR EN LA DIABETES Uno de los puntos en común entre la disfunción endotelial
de la microcirculación cerebral y la de la retiniana es sin duda, el es-
La similitud anatómica y funcional existente entre la circu- trés oxidativo.
lación retiniana y la circulación cerebral ha conducido a considerar
que las alteraciones vasculares retinianas pueden tener un valor pro- El grupo de Frisbee, en la arteria cerebral media de ratas
nóstico, es decir, servir como marcadores de enfermedad cerebrovas- diabéticas, observó una disfunción endotelial a partir de la vasodi-
cular (30). latación alterada de la acetilcolina. Estos investigadores indicaron
que existía una reducida biodisponibilidad de NO, que podría reflejar
La retina y el cerebro comparten un suministro de sangre un secuestro del NO llevado a cabo por las especies reactivas de oxí-
común a través de la arteria carótida interna. La retina y el cerebro geno. Dicha posibilidad quedó confirmada con el efecto del antioxi-
presentan una elevada actividad metabólica, de ahí la riqueza en dante tempol, que mejoró la vasodilatación de la arteria cerebral de
mitocondrias y su elevado consumo de oxígeno. Si a ello le sumamos las ratas diabéticas. Este resultado, unido al efecto de la indometa-
la escasa capacidad de almacenamiento de energía por parte de estos cina, conduce a pensar que la disfunción endotelial cerebral en la
tejidos, se entiende que estas circulaciones necesariamente presenten diabetes es el resultado de la generación de un estado prooxidante
robustos procesos de regulación del flujo sanguíneo, como los que y proinflamatorio, como se había observado en la circulación reti-
hemos descrito anteriormente. Otro punto en común es que sus ca- niana (33). Por lo tanto, no es de extrañar que las modificaciones
pilares forman parte de barreras fisiológicas, la barrera hematoen- microvasculares de la retina puedan reflejar la patología microvas-
cefálica y la barrera hematorretiniana, que presentan como función cular cerebral. En este sentido, Bettermann y col. (34), al someter a
esencial regular la composición del medio extracelular del sistema los individuos objeto de estudio, a una maniobra de hiperventilación
nervioso central y de la retina, respectivamente. Entre estas barreras para comprobar su capacidad de autorregulación cerebral, observa-
también existen puntos en común, como el que las células endote- ron que los cambios inducidos en el diámetro de la arteria cerebral
liales de ambas circulaciones estén unidas por los mismos tipos de media fueron significativamente menores en los diabéticos que en
conexiones intercelulares o que el movimiento de moléculas a través los individuos sanos. Incluso los individuos con prediabetes ya tendían
de dichas barreras dependa de transportadores similares. Para man- a mostrar una peor reactividad vascular que los sanos pero mejor
tener las propiedades de barrera son imprescindibles los pericitos de autorregulación que los diabéticos. Por otro lado, la reactividad vas-
los capilares y las células gliales, astrocitos en cerebro y células de cular retiniana, tanto venosa como arterial, tras realizar en los mis-
Müller en retina, que establecen relaciones con las neuronas vecinas mos individuos una estimulación con luz parpadeante, fue menor en
y los vasos sanguíneos constituyendo las unidades neurovasculares los individuos prediabéticos y diabéticos. Los autores, basándose en
que ya hemos mencionado (30). el paralelismo observado en el grado de afectación vascular retini-
nana y cerebral en los mismos individuos, proponen la utilización de
En los diabéticos no sólo existe un mayor riesgo de desarro- esta simple técnica como exploración de rutina para desvelar tem-
llar enfermedad cerebrovascular (ECV), sino que además su progre- pranamente las complicaciones microvasculares diabéticas.
sión es más severa, la recuperación es más lenta y presentan una
mayor mortalidad (31). Recientemente Wang y col. (35), gracias una técnica que
ha revolucionado la oftalmología, la angiografía por tomografía de
La ECV puede ser isquémica o hemorrágica. La isquémica coherencia óptica, han evaluado la densidad vascular retiniana en
puede cursar como una isquemia cerebral transitoria, cuando se re- pacientes con enfermedad cerebral microvascular y así han relacio-
suelven todos los signos y síntomas neurológicos en 24 h, o como un nado la perfusión de la retina con las imágenes cerebrales de reso-
infarto cerebral, y dentro de esta posibilidad, la incidencia en los dia- nancia magnética y la función cognitiva.
béticos de los infartos lacunares es mayor que la de los no lacunares,
lo que sugiere la importancia de la afectación microvascular. El estudio reveló una hipoperfusión retiniana en pacientes
con ECV por afectación del plexo capilar superficial y de los capilares
La ECV hemorrágica, es mucho menos frecuente, y cuando radiales peripapilares, que estaba relacionada con zonas de una
aparece está relacionada con el desarrollo de hipertensión arterial. hiperintensidad severa de la sustancia blanca en las imágenes de
En los diabéticos está incrementado el riesgo de desarrollar demen- resonancia magnética. Hiperintensidades que se deben a factores de
cia, no sólo de demencia vascular sino también de enfermedad de
Alzheimer. Algunos autores se refieren a esta relación, entre diabetes
y deterioro cognitivo, como “diabetes tipo 3”.
La retina, una ventana de la enfermedad cerebrovascular en la diabetes 27
Sara Benedito Castellote
An. Real Acad. Farm.Vol. 88. nº 1 (2022) · pp. 19-29