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ANALES ciado y Doctor, ganó cátedra mediante dificil oposición) parece po-
RANF derse deducir que sí dieron el resultado esperado; aunque no puede
asegurarse que siempre ocurriera de igual modo en otros casos.
www.analesranf.com Pero es evidente que lo mismo que logró Don José pudieron hacerlo
otros becarios, sobre los que hay menos datos.
siastico de este Obispado por nombramiento del Provisor, y Gover-
nador de él. Es Presbytero, y tiene de su Ordinario licencias gene- Por los motivos y circunstancias que se exponen resumi-
rales de predicar con ejercicio, y confesar en este Obispado. Tiene damente a continuación, se puede concluir que dicha etapa favora-
igualmente testimoniales, que le acreditan de buena vida, y cos- ble fue breve, ya que terminó oficialmente en 1798. Poco después
tumbres, y capaz de obtener qualquier Beneficio, o Prebenda Ecle- se produjeron algunas transitorias recuperaciones, aunque sólo par-
siastica. Y últimamente consta por testimonio autorizado por tres ciales y peculiares, alternando los peores periodos con otros espe-
de los Escribanos de la Villa de Ledesma, que el referido Don Josef ranzadores, prolongados éstos hasta comienzos de la década de
es noble notorio de sangre. 1940, que enlazan con su resurgir hasta llegar a nuestros días.
5. ETAPA TRISTE DE LOS COLEGIOS MAYORES DE LA UNIVER-
¿Cuánto tiempo desempeñó la importante cátedra de Ins- SIDAD DE SALAMANCA: 1798-1873
tituciones Canónicas el hidalgo Presbítero Profesor Fernández del
Campo en esta Universidad?: Una vez más, en el Archivo de ella, Se estima por los especialistas que la política exterior lle-
en el expediente AUSA/1019, 94-137, del año 1798, se halla un es- vada a cabo por Carlos III, participando España en guerras foráneas,
crito que aporta el dato de la fecha de su muerte. Se titula: Proceso no fue siempre afortunada; y que, en cambio, la orientada al des-
de provision de la cathedra de Instituciones Canonicas por falleci- arrollo económico y cultural del país fue muy acertada. Contó para
miento del Dr. Josef Fernandez del Campo. ello con la colaboración de eficaces Ministros, por él elegidos, im-
pregnados del espíritu de la Ilustración (tan característico del siglo
Se deduce que, habiendo obtenido dicha cátedra en no- XVIII), que actuaban de modo similar a como se hacía en otras na-
viembre de 1786, fue durante unos doce años el periodo de tiempo ciones europeas cada vez más pujantes (entre las que Francia era
en que impartió sus clases en alguna de las dos aulas del claustro el modelo más imitado). Precisamente estas tendencias ilustradas
bajo del edificio histórico cuyas lápidas situadas encima de sus puer- no eran muy acordes con la mentalidad de las épocas precedentes
tas respectivas dicen en latín: JURI CANONICO. En una de ellas, españolas que marcaron el rumbo de la marcha de los Colegios Ma-
que es el actual paraninfo, se muestra el escudo con la tiara ponti- yores universitarios. No obstante, con las imposiciones restrictivas
ficia del mencionado Benedicto XIII, antiguo alumno y luego pro- de aquel reinado antes apuntadas, durante ese periodo se siguió
tector de esta Universidad, a la que concedió privilegios. La otra, respetando escrupulosamente (mediante el nuevo funcionamiento)
perteneciente al aula denominada desde hace no muchos años la existencia de dichos Colegios.
"aula de Unamuno" (aunque Don Miguel no dio sus clases en ella
sino en otra de la planta superior), tiene una inscripción latina que, Cuando falleció Carlos III, en 1788, su sucesor, Carlos IV,
traducida, esencialmente dice: desoyendo los consejos paternos relativos a mantener en los cargos
importantes a los experimentados Ministros que con aquél habían
Se estableció en este lugar el estudio para que la Iglesia trabajado, prefirió entregar el gobierno de la nación a un joven in-
de Cristo viva próspera y resplandezca siempre por su piedad y re- experto guardia de Corps, Manuel Godoy, protegido de la reina,
ligión, defendida por los sabios decretos de los Pontífices. quizá pensando que las nuevas y preocupantes circunstancias inter-
nacionales estaban resultando muy diferentes de las anteriores y
Como simple curiosa coincidencia, cabe indicar el hecho aconsejaban nuevos enfoques.
de que, a finales del siglo XIX, unos 100 años después de que el ca-
tedrático Don José impartiera allí sus enseñanzas, un pariente suyo, Muchos contemporáneos de Godoy consideraron a éste
Don Felipe Fernández del Campo Mateos, siendo ya Maestro Na- como persona de talento perspicaz y, sobre todo, de una desmesu-
cional, cursaba como alumno en esas aulas la misma asignatura. rada ambición. Lo cierto es que, acumulando privilegios, ascendió
Y, otros 100 años más tarde, un nieto de éste –quien suscribe, cuyo en poco tiempo a puestos de máxima altura, que también conlle-
apellido materno es igualmente Fernández del Campo–, siendo Vi- vaban máxima responsabilidad. Gran parte de la población, y en
cerrector de Investigación de la Universidad, organizó una Reunión particular la nobleza, no vio con buenos ojos estos inesperados as-
para potenciar la Investigación en el área de las Ciencias Experi- censos. A su favor se ha señalado que su dificil tarea coincidió con
mentales en el año 1985 y otra sobre Humanidades en 1986, cuyas etapas de inseguridad internacional derivadas de la Revolución
sesiones se desarrollaron también en el aula de Unamuno.
Volviendo al asunto de si fueron o no eficaces las reformas
introducidas en 1771 para mejorar el funcionamiento de los Cole-
gios Mayores –que a su vez deberían mejorar la marcha de la pro-
pia Universidad–, del presente análisis relativo a la trayectoria
profesional del que fue becario del Colegio Mayor de Oviedo Don
Josef Fernandez del Campo (quien alcanzados los Grados de Licen-
Crisis de los Colegios Mayores de la Universidad de Salamanca 421
(siglos XVIII–XX). Su vinculación con la Diputación (siglo XIX)
José Antonio Cabezas Fernández del Campo
An. Real Acad. Farm.Vol. 87. nº 4 (2021) · pp. 415-431