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VOL. 68 (4),  BOTICA Y FARMACIA EN EL QUIJOTE

tos para curarse. (P. I: Cap. III). Es decir, avezado lector, estaba reco-
mendando el uso de los botiquines de campaña unipersonales.

      Prometióle Don Quijote de hacer lo que se le aconsejaba con toda
puntualidad, como más adelante tendremos ocasión de ver; mejor dicho,
de leer.

      Armado, pues, caballero, alborozado, contento y gallardo, Don
Quijote salió de la Venta y en seguida recordó los consejos del Ventero
acerca de las prevenciones tan necesarias que había de llevar consigo,
entre las que Cidi Hamete Benengelí reseña los dineros y las camisas,
sin recordar la arqueta con hilas y ungüentos que tan oportunamente
destaca su homónimo Boticaril y que tan buenas ayudas prestaron a sus
quebrantados huesos al final de las muchas y disparatadas aventuras que
nuestro héroe vivió.

      Mientras iba camino de la aldea, salieron de la espesura unas voces
quejumbrosas y él, Don Quijote, se dispuso a cumplir lo que debía a su
recién estrenada profesión y a lo que el talante caballeresco demandaba.

      De Juan Haldudo, el Rico, vecino de Quintanar, escuchó Don Qui-
jote que se había gastado en su criado Andrés, al que azotaba, un real de
dos sangrías (2) que le habían hecho estando enfermo (P. I: Cap. IIII) y,
aunque esta fuera una práctica habitual en barberos y cirujanos menores,
está bien destacarla en este trabajo pues, en ocasiones, las llevaban a
cabo los boticarios. Por otra parte, nos conviene tener presente el coste
de este acto sanitario por si llegáramos a necesitarlo a la hora de anali-
zar, junto con otros parámetros macroeconómicos, el gasto farmacéutico
de la época.

      Soñando en su Dulcinea, llegó a toparse con un grupo de mercade-
res toledanos a los que con voz y ademán arrogantes detuvo en su cami-
nar para que confesaran que no había en el mundo doncella más hermosa
que la Emperatriz de la Mancha, la sin par Dulcinea del Toboso. ¡Qué
lejos estaba nuestro héroe de pensar que esta exigencia suya iba a depa-
rar a los siglos venideros una de las más hermosas lecciones de Dermo-
farmacia que se nos haya dado escuchar!

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