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VOL. 75 (4), 923-96, 2009 LAS FARMACOPEAS DE MÉXICO Y ESTADOS UNIDOS...
tante empresa— al igual que en el caso de los Estados Unidos, la
organización encargada de la publicación de la primera Farmacopea
del país era de tipo privado. De hecho, a partir de la segunda edi-
ción, la financiación del texto comenzó a correr por cuenta exclusi-
va de la Sociedad Farmacéutica Mexicana, que fue la heredera de los
miembros y los intereses de la Academia de Farmacia, disuelta ape-
nas publicada la edición de 1846. En cuanto a su oficialidad, es im-
portante destacar que en 1883 la Farmacopea Mexicana fue recono-
cida como texto legal para el Distrito Federal y algunos estados, y
que posteriormente habría de ampliar su ámbito de influencia legal,
aunque su uso continuó siendo moderado y su carácter no obligato-
rio en todo el territorio.
La diferencia con el código norteamericano aparece en 1930,
cuando el Estado Mexicano a través del Departamento de Salubridad
Pública —hoy Secretaría de Salud—, tomó bajo su responsabilidad
la publicación de la Farmacopea, labor que mantiene hasta la fecha
y que implica su obligatoriedad en todo el territorio.
6. EN EL CORRER DEL TIEMPO
Han pasado muchos años desde la primera edición de ambos
textos. En el caso de los Estados Unidos la evolución de las funcio-
nes y el alcance de la USP han sido muy considerables. Durante sus
primeros ochenta años de vida, la USP se sostenía gracias a una
docena de hombres responsables de las siete ediciones aparecidas en
el siglo XIX.
En nuestros días, los profesionales involucrados en su publica-
ción son numerosos, sin embargo, el espíritu de voluntarismo se
mantiene, lo mismo que el arduo trabajo de revisión que ha permi-
tido cumplir sus 26 ediciones. La década de 1930 trajo la confirma-
ción de la USP y el NF como estándares de su género por la ya men-
cionada Food and Drug Cosmetic Act de 1938.
En las dos décadas siguientes, se dio la consolidación de las re-
laciones entre la Convención y la industria farmacéutica, hecho
importantísimo en la historia de la USP. Para los años sesenta, hubo
un incontenible aumento de los contenidos de la USP; sólo la edición
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