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VOL. 71 (4), 951-963, 2005 NECROLÓGICA DON SEGUNDO JIMÉNEZ GÓMEZ
Cuando el laboratorio de análisis estaba normalizado y trabajan-
do en régimen estacionario, rebasando la esfera de sus obligaciones,
supo inventarse otras nuevas y se sumó al esfuerzo de los que esta-
ban obligados a la creación técnica para crear procedimientos, de-
sarrollar y adaptar procesos.
Su atención investigadora se dirigió hacia:
• La recuperación industrial de metales por cambio iónico y
extracción de disoluciones.
• El diseño y estudio de procesos selectivos de lixiviación con
fines hidrometalúrgicos de metales no férreos.
• La formación y estabilidad térmica de arseniatos y sales bá-
sicas.
Aparte publicaciones científicas y técnicas en revistas españolas
y extranjeras, fue autor de una veintena de patentes de invención
referentes al aprovechamiento de las piritas arsenicales.
Por su actividad investigadora en el INI fue condecorado con la
Orden de Alfonso X El Sabio.
Aquí entro yo en juego para seguir una de las líneas de investi-
gación abiertas por él. En marzo de 1961 el profesor Vián me había
propuesto como trabajo experimental de la tesina de licenciatura el
estudio del comportamiento de los arseniatos de cinc de la mano de
Don Segundo; aquello acabó con buenas perspectivas y pronto me
ofreció realizar la tesis doctoral como becario de Piritas. El tema era
ambicioso, se trataba de seguir la evolución del arsénico contenido
en las piritas, desde el mineral, pasando por las cenizas de tostación
en lecho fluidizado y la extracción ácida de los metales no férreos
para dejar limpia una matriz de óxido de hierro que pudiera ser
alimentada al homo alto para obtener hierro.
Don Ángel me dejó en manos del Doctor Jiménez, que fue el
director ejecutivo de aquella tesis. Yo era un almacén de conoci-
mientos desordenados e inconscientes, con los ojos muy abiertos
pero sorprendido y sin saber cómo aprovechar mis recursos. Com-
prendí pronto que necesitaba un maestro que me orientase y apro-
vechase mis potenciales energías químicas. Doy fe de que lo encon-
tré y hoy, otra vez, se lo agradezco.
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