Page 42 - 86_04
P. 42
1. INTRODUCCIÓN Y CONCEPTOS ANALES
La European Society of Parenteral and Enteral Nutrition RANF
(ESPEN) define la Nutrición Clínica (NC) como la disciplina que se www.analesranf.com
ocupa de la prevención, diagnóstico y tratamiento de los cambios
nutricionales y metabólicos relacionados con enfermedades agudas La NE consiste en el aporte de nutrientes al organismo a
o crónicas y con condiciones causadas por un exceso o falta de ener- través de la vía digestiva, mediante una fórmula de?nida. Incluye
gía (1). la vía oral y la administración directa al tubo digestivo, vía naso-
gástrica, nasoentérica o percutánea. La NP es la administración de
El Soporte Nutricional (SN) es la provisión de los nutrien- los nutrientes por la vía intravenosa, y ésta puede ser parcial o
tes necesarios para cubrir las necesidades (basales y/o derivadas de total en función si cubre o no respectivamente el 100 % de los re-
la situación patológica del paciente) por vía oral, enteral o paren- querimientos de macro y micronutrientes (Figura 1).
teral, con el objetivo de mejorar o mantener el estado nutricional.
Cuando un paciente necesita NE o NP, ya sea de forma
El Soporte Nutricional Especializado (SNE) incluye la in- transitoria o definitiva, y no requiere de permanencia en el hospi-
tención terapéutica, es decir, que no se limita a la Nutrición Enteral tal, se puede realizar la administración de la nutrición en el do-
(NE) o Parenteral (NP) para mantener y/o restaurar el estado de micilio del paciente siempre que sea posible. La utilización de la
nutrición óptimo y la salud. El SNE está considerado como una te- nutrición artificial fuera del ámbito hospitalario (NAD) ha demos-
rapia de alta complejidad, cuyo empleo se asocia con un riesgo ele- trado su efectividad y seguridad a lo largo de los años, ya que per-
vado de aparición de complicaciones. Algunas de ellas son mite una mejora de la calidad de vida de algunos pacientes que
extremadamente graves y pueden llegar a tener consecuencias fa- de otra forma estarían obligados a una estancia hospitalaria pro-
tales para el paciente, mientras que otras, con carácter menos grave, longada, con los riesgos y costes asociados a la misma (3). La NAD
tienen el riesgo de interferir con los objetivos nutricionales de los puede administrarse tanto por vía parenteral (NPD) como por vía
pacientes (2). enteral (NED) fuera del entorno hospitalario, pero siempre con los
controles oportunos.
En los países occidentales, hasta el 50% de los pacientes
hospitalizados están malnutridos, y sólo el 8% reciben un diag-
nóstico de malnutrición durante su estancia hospitalaria (4).
Figura 1: Algoritmo de decisión para el tratamiento, oral, enteral o parenteral. Se decide el tipo de alimentación oral, enteral o parenteral dependiendo de la integridad
del tracto gastrointestinal. Si el tracto no es funcionate se aporta Nutrición Parenteral. La Nutrición Parenteral será Periférica cuando se alargue menos de 7 días (menor
requerimiento de nutrientes, siendo la vía de acceso es de menor calibre); la Nutrición Parenteral será Central, para tratamientos más largos que requieren más nutrición,
más osmolaridad). Si el tracto es funcionante se selecciona la Nutrición oral o la Enteral. Si la ingesta cubre más del 60% de las ingestas recomendadas de energía y nu-
trientes y puede darse por boca se elige dieta oral con suplementos. Cuando la Ingesta sea insuficiente (<50% RDA): Nutrición Enteral. Para periodos menores de 6 se-
manas se aportará la nutrición enteral con Sondas Nasoentéricas, bien Nasogástricas (nariz-estómago) si no hay riesgo de aspiración o nasoduodenales (nariz-duodeno)
y Nasoyeyunal (nariz-yeyuno) cuando haya riesgo. Para una Nutrición Enteral de más de 6 semanas, se emplearám Ostomías (acceso directo quirúrgico de la sonda) que
se conocen por Gastroctomía (aporte directo a estómago) o Yeyonostomía (acceso directo a Yeyuno).
Holistic management of home artificial nutrition: hu-
258 manization and innovation at patient’s service
José Manuel Martínez Sesmero
An. Real Acad. Farm. Vol. 86. Nº4 (2020) · pp. 257 - 268