Page 100 - 84_04
P. 100

material que durante los últimos años de crisis económica que hemos padecido. Lo cual no ha impedido, ni impide, que
continuásemos con nuestras actividades y con la colaboración con el Estado y el resto de las instituciones con idéntico
entusiasmo, pese a nuestra progresiva pobreza material, desde nuestra total lealtad institucional y nuestra radical
independencia.

    Un hecho histórico destacable de la contribución de la corona española a mejorar la salud de los ciudadanos a nivel
global fue la expedición filantrópica de la vacuna contra la viruela, enfermedad que cada año mataba en el viejo continente a
mas de 400 000 personas y que bajo el patronazgo del rey Carlos IV llevó a cabo el cirujano alicantino Francisco Javier
Balmis, saliendo en el barco María Pita desde el puerto de la Coruña el 30 de noviembre de 1803 hacia las colonias de
Ultramar del imperio español, expedición que duró hasta el año 1814. El viaje de Balmis resultó ser el primer ejemplo de
vacunación a escala global, mucho antes de que existiera la Organización Mundial de la Salud (OMS), y fue en boca del
propio Edward Jenner, descubridor de la vacuna que ha salvado millones de vidas, "el más noble ejemplo de filantropía que
exista en los anales de la Historia".

    Situándonos en el plano actual, ¿cómo se ve el futuro del Instituto de España y de las academias que lo integran? La
incorporación de las nuevas tecnologías a la dinámica mundial, los recientes avances científicos sobre el genoma humano y
de otras especies animales y vegetales que habitan el planeta Tierra, que inciden favorablemente en la mejora de la salud y
calidad de vida de los ciudadanos, y que a su vez fomentan la capacidad creativa de las personas, conlleva a las academias
en la misión de ayudar a tomar las mejores decisiones en políticas públicas de ciencia, ingeniería, salud, economía, ciencias
sociales, artes o humanidades, o sobre planes de formación superior, en un diálogo permanente con el Gobierno de la
Nación. También, hacer llegar a la sociedad la importancia creciente de los avances científicos y tecnológicos en todos los
aspectos de la vida diaria. Estos son temas continuos de debate en las distintas academias.

    Sirvan de ejemplo algunos eventos recientes. Sus Majestades asistieron el pasado mes de mayo, en el Palacio de El
Pardo, a la presentación del Diccionario Biográfico electrónico con mas de 45000 vidas elaborado por la Real Academia de
la Historia, evento singular a nivel mundial. Aparte de las actividades que cada academia realiza en sus sedes, hemos
llevado a cabo actividades conjuntas entre academias que implican la interacción entre dos, cuatro o las diez Reales
Academias, como el encuentro entre mayo y junio sobre “el cerebro y creatividad”, o el que se celebrará sobre el “big data”
en noviembre. No olvidemos la reunión prevista para el próximo mes de diciembre con las Academias asociadas.

    Las múltiples actividades científicas que se vienen realizando en todas las Reales academias se reflejan en el resumen de
sus actividades presentado por el Académico Secretario de la RANF. Indudablemente, las academias han sido y siguen
siendo las entidades que representan la excelencia en los diversos campos de las ciencias, las artes y las humanidades. Sus
valores esenciales son, por un lado, la categoría de sus miembros, en quienes concurren los más altos méritos intelectuales y
científicos, y por otro, su estabilidad e independencia. En la época actual, tanto o más que en los siglos pasados, esos
valores de excelencia e independencia justifican que las Reales Academias sigan siendo centros de pensamiento, de cultura
y de investigación avanzada, libre y sosegada, que aporten luz sobre los complejos problemas de nuestro tiempo.

    Majestad, el alto patronato que la Corona ejerce sobre todas las Reales Academias, vuestro ejemplo de sosiego,
modernización y firmeza en el patriotismo y en la defensa de la ley y de las instituciones, es un acicate para todos los
académicos españoles empeñados, como siempre, en un esfuerzo de superación hacia la excelencia en nuestros respectivos
ámbitos de competencia, acompañado durante estos últimos lustros, de una cada vez mayor apertura a la sociedad.

    Nuestro deseo es el de fortalecer al Estado español desde las respectivas capacidades de cada Academia y ayudar a
nuestros conciudadanos a través de los diversos ámbitos de saber presentes en todas y cada una de ellas.

    Vuestra presencia, Majestad, nos enorgullece y alegra. Como todos los años, quisiera volver a poner de relieve el gran
aliento que vuestra figura y cercanía supone entre nosotros y el deseo de que podamos seguir encontrándonos y disfrutando
de vuestro alto patronazgo durante muchísimos años.

    He dicho.

@Real Academia Nacional de Farmacia. Spain  425
   95   96   97   98   99   100   101   102   103   104   105