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VOL. 75 (2), 315-323, 2009 NECROLÓGICA DON MANUEL REOL TEJADA
demias de Farmacia de Argentina, Brasil, Cataluña, Chile, Galicia,
Iberoamericana, México, Murcia, Paraguay, Peruana y la nuestra, pro-
mueven el intercambio de experiencias entre las Academias asociadas,
el cultivo de las ciencias farmacéuticas y el asesorar a los Gobiernos y
organizaciones políticas iberoamericanas, en el mejor servicio a la
salud pública y a la sociedad. Una reunión y una declaración que pre-
paró con especial esmero desde su presidencia. Sé del enorme esfuer-
zo que realizó para llevar a buen término esa reunión y su gran inte-
rés para que se creara la AIAF. En una de mis últimas conversaciones
telefónicas con él, en el verano de 2008, me recordaba la «Declaración
de Madrid» y me encomendaba que lo plasmara para su perpetuación.
Aunque me hubiese gustado hacerlo en otro foro, así y aquí lo hago,
manifestando solemnemente como Secretario y por tanto notario de
esta RANF, que fue su gran y afinado motor.
Si la Academia fue para él como una madre y ya dice un prover-
bio árabe que «quien quiere a su madre no puede ser malo», la Fun-
dación Casares Gil fue su hija mimada y consentida. «De buena vid
planta la viña y de buena madre, la hija». Durante su presidencia la
Fundación vio aumentado en un 60 por 100 su presupuesto, gracias
a su gestión personal con la Fundación Caja Madrid y con los labo-
ratorios farmacéuticos; se realizaron sesiones patrocinadas por aqué-
lla un jueves de cada mes y como no puede ser de otra forma, se
pone al mejor servicio de su madre, es decir, de la Academia.
Juan Manuel Reol disponía en su ánimo de una especial delica-
deza, comenzando las Juntas de Gobierno y las Generales con un
recuerdo a los Académicos enfermos y a sus familiares, así como a
las víctimas de accidentes o del terrorismo.
Con las Juntas de Gobierno era riguroso, fijaba siempre a prin-
cipios de año el calendario y decía que lo más importante que tenía
un miembro de esa Junta era su asistencia mensual a ellas.
Buscaba siempre la armonía y colaboración de todos los miem-
bros de la Junta de Gobierno, lo que era también proyectado a los
demás. He extraído un párrafo de una Junta de Gobierno en este
sentido, omitiendo los nombres: «Tras un intercambio de opiniones
entre los Doctores…, el Doctor Reol aúna las opiniones de todos en
el sentido de que en la Corporación prima el principio de colabora-
ción de todos los Académicos».
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