Page 175 - 72_01
P. 175
VOL. 72 (1), 171-177, 2006 NECROLÓGICA DON ANTONIO PORTOLÉS ALONSO
los difíciles momentos que, en tantas ocasiones, hemos pasado sus
becarios frente a esa poyata que en el laboratorio, a menudo, «trai-
cionaba» con su implacable rigor científico nuestras hipótesis expe-
rimentales. Bien sabes Mari Tere que, sin fisuras, siempre contarás
con nuestro reconocimiento y ahora, más que nunca, nos gustaría
devolverte un poco del aliento y del afecto que tú nos has proporcio-
nado en tantas oportunidades difíciles de nuestra vidas.
Descansa en paz, querido e irrepetible maestro, pero, antes de
terminar, déjame usurparte, a ti que con tanto esmero cuidabas el
estilo literario de tus escritos, uno de los latines que de ti aprendi-
mos y que, en esta oportunidad, tan adecuadamente define y resume
tu fructífera vida: Sic luceat lux.
Muchas gracias por su atención.
177