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OESTE H., FRUTOS P., TORRADO S. ANAL. REAL ACAD. NAC. FARM
locales de antibióticos requeridas, que por otra parte, pueden
incluso ser perjudiciales debido a los importantes efectos tóxicos dosis-
dependientes de algunos de los antibióticos utilizados.
Por este motivo, en los años setenta y ochenta (1, 2, 3), se
introdujo el concepto de la terapia local antibacteriana, en forma de
cementos óseos impregnados con antibióticos para la prevención de las
infecciones óseas. En la actualidad se continuan utilizando de forma
generalizada cementos óseos acrílicos de polimetilmetacrilatos que
contienen antibióticos para la prevención de infecciones locales, tanto de
huesos como de tejidos blandos.
La principal ventaja que presenta la terapia local frente a la terapia
sistémica es que cede altas concentraciones del antibacteriano en la zona,
evitándose la aparición de efectos secundarios como nefrotoxicidades,
ototoxicidades y complicaciones alérgicas, ya que la terapia sistémica
requiere altas dosis de antibiótico para conseguir una buena efectividad en
una zona, que está pobremente vascularizada, como es el hueso infectado.
El antibiótico administrado "in situ" parece que sistémicamente no se
absorbe y es mas efectivo, alcanzándose concentraciones locales de
fármaco de 5 a 10 veces superiores a las conseguidas con la
administración parenteral (4, 5, 6).
En los cementos óseos, el antibiótico mas utilizado ha sido la
gentamicina por ser un agente que resiste las altas temperaturas
alcanzadas en la polimerización de los cementos.
En este trabajo se ha sustituido la gentamicina por dos
cefalosporinas, la ceftazidima y la cefotaxima, debido a que su espectro
de acción es más amplio frente a microorganismos gram (-). La
ceftazidima ocupa un lugar intermedio entre las cefalosporinas de tercera
y cuarta generación ya que aunque formalmente se la suele incluir entre
las de tercera, su potente actividad antipseudomonas sugiere una clara
diferencia sobre la mayoría de las incluidas en ese grupo. La cefotaxima
es el antibiótico más ampliamente utilizado dentro del grupo de las
cefalosporinas de tercera generación y entre sus indicaciones se
encuentran las infecciones óseas y articulares producidas por
Pseudomonas aeruginosa (7).
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